Las autoridades en San Antonio, Texas encontraron a cincuenta personas muertas y 16 heridas dentro de un camión que se presume entraba ilegalmente a Estados Unidos. El jefe de bomberos Charles Hood informó que, entre las personas trasladadas a hospitales cercanos, habían 12 adultos y cuatro niños con afecciones relacionadas con el calor.
Según McManus, las personas que iban a bordo del camión formaban parte de un presunto intento de contrabando de migrantes y el área de Investigaciones de Seguridad Nacional está investigando. Aunque tres personas fueron detenidas, aún no está claro si estaban relacionadas con el tráfico de personas, agregó el jefe policial.
Por su parte, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, informó que, entre los cincuenta migrantes muertos, al menos veintidós eran mexicanos. “Hasta ahora son 50 los fallecidos: 22 de México, 7 de Guatemala, 2 de Honduras y 19 todavía sin información sobre su nacionalidad”, confirmó el mandatario durante su rueda de prensa desde el Palacio Nacional.